Hasta siempre Mariela Rabino
Y un día se nos quebró la sonrisa y las lágrimas arrasaron, cargadas de recuerdos.
Y un día te fuiste, Marielita, y sin permiso…
Ya nada será igual en el Bicentenario. Nos has dejado muy solos.
Pero nos queda tu luz, el brillo incomparable de tu mirada, la alegría de tu voz.
Nos enseñaste a vivir honrando la vida.
Te amamos infinitamente y nos amaste.
Hoy es sólo dolor. Pero te prometemos que mañana nos pondremos en marcha, tras tu ejemplo.
Porque se puede seguir, siempre. Es tu legado.
Te nos adelantaste mucho querida.
Que brille para vos la luz que no tiene fin.
Hasta siempre, querida, inolvidable Mariela
Tu Bicentenario.